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Psicoterapia como la mejor inversión

Hola, en esta primera entrega de mi columna quiero compartirte algunas cosas con las que creo, te podrás identificar. Vivimos en tiempos donde rendir al máximo es la idea que impera en todos los ámbitos de nuestra vida. Tienes que ser el mejor siempre y en todo. Conceptos como éxito, reconocimiento, prosperidad, felicidad, superación, productividad son ideas que tienes arraigadas en lo más profundo de tu ser y que de manera consciente o inconsciente gobiernan tu actuar bajo el impulso de una fuerza aún más grande: el miedo a fracasar, a no cumplir las expectativas que se tienen de ti, a no ser reconocido, en resumidas cuentas: a ser invisible; ¿te suena conocido?.


La pregunta que refleja este miedo sería entonces: ¿Cuál es el método más eficaz para alcanzar el éxito, la felicidad y cumplir las expectativas que tienen de mi?. Sabes bien que no existen recetas o remedios que funcionen para todos por igual, lo que si pienso es que a todos nos gustaría lograr una relación armónica con el caos de la vida cotidiana para ser, además de productivos, felices.


¿Qué es la felicidad? ¿Qué es el éxito? ¿Qué es el reconocimiento? Son cuestiones total y absolutamente subjetivas para las que no existe definición más que la que cada quien construya de acuerdo a sus experiencias de vida. El que si es un lugar común es que, independientemente de que signifiquen, todos buscamos el binomio éxito + reconocimiento = felicidad. Al menos eso te han hecho creer. Quien diga lo contrario esta mintiendo.


Solamente cuando las personas se sienten lo suficientemente mal con su vida, cuerpo, trabajo, pareja, etcétera es que deciden hacer cambios como por ejemplo acudir a terapia. La pregunta aquí es: ¿cuánto es suficientemente mal? Empezar un proceso terapéutico lejos de ser un signo de debilidad es un signo de valentía, de coraje con la vida, es también una de las mejores inversiones que puedes hacer – en todos los sentidos – en tu proyecto más importante, tú mismo.


Los espero la próxima semana. Hagan que su día cuente y recuerden hacer todos los días algo que los acerque a su objetivo.

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