La razón más poderosa para recibir ayuda profesional
A diferencia de las entregas anteriores, este artículo no está dedicado a hacer recomendaciones para observar signos de alerta. En este caso no hablaremos de tips o de sugerencias para recomendar ayuda a un familiar o a algún amigo. No, eso no, porque estas líneas están dirigidas a TI. A TI que estas en sufrimiento, que llevas muchos días sin poder dormir 4 horas seguidas, que haz invertido mucho dinero comprando maquillaje para ocultar las ojeras. A TI que después de cada atracón de comida te consume la culpa, a TI para quien cada vez es más insoportable la resaca, a TI que ya no tienes uñas por comértelas “por los nervios”. Porque, si tú me estás leyendo y has sentido esto, si lo vives a diario y no lo platicas, si lo tienes como un tema pendiente sin resolver, sabes muy bien lo que significa estar en sufrimiento. Y es de sufrimiento de lo que ya no es necesario seguir hablando, sino de que la salida a estos laberintos emocionales, existe. La principal razón para tomar terapia no es “porque deberíamos” “porque algo anda mal con nosotros” o “porque alguien nos ve raros”. NO, La causa más legítima y más poderosa para recibir ayuda profesional es el poder ser felices y tener bienestar. De hecho, existe una disciplina, la psicología positiva, que afirma lo conveniente y las ventajas de tomar terapia no sólo cuando se está mal, sino para estar mejor.
La terapia psicológica o, en su caso, el tratamiento multidisciplinario, tiene como objetivo proporcionar a la persona un abanico de posibilidades para ser más felices, para poder disfrutar sus días y su vida. Es por eso que este mensaje está dedicado a TI. Hay una gran variedad de opciones: habemos terapeutas sistémicos, familiares, de pareja, individual de distintos enfoques, etc. Existen también instituciones que proporcionan servicios, consultorios particulares, etc. Este mensaje es para ti porque hoy, más que nunca, ser y estar bien es TÚ responsabilidad.