Alegre alegría de iniciar
LA ALEGRÍA
Es el primer jalón del año, han pasado ya quince días en los que oficialmente se acabaron las fiestas, las reuniones familiares, las cenas, los abrazos, tanta dicha, tanta felicidad , hace parecer a enero como el “lunes” de los meses del año, el mes en el que apenas nos estamos bajando de esta montaña rusa de emociones que son las fiestas de fin de año, de la que apenas comenzamos a bajarnos. Alegría , felicidad, dicha son las emociones que todavía nos embargan, y mas si todavia podemos en niños cercanos a nosotros la fiesta del dia de reyes.
Pero, ¿qué sucede en nuestra mente cuando todas estas emociones nos embargan?
Pensamos que la dicha viene como lo dice el hada de Shrek, en el frasco que dice “felices por siempre” y quizás tenga algo de razón, aunque no exactamente un frasco, sino una glándula ubicada en la base del cerebro llamada glándula pituitaria. Es una glándula compleja que se aloja en un espacio óseo llamado silla turca del hueso esfenoides. ¿qué es lo que aloja esta glándula? Pues en esta glándula se producen hormonas llamadas endorfinas, mejor conocidas como hormonas de la felicidad.
Las endorfinas son neuro-péptidos (pequeñas cadenas proteicas) que viajan por la médula y el torrente sanguíneo, cabe decir que son sedantes naturales del cuerpo.
Además las endorfinas tienen un rol importante en la recuperación y tiene funciones esenciales para la salud:
o Promueven la calma
o crean un estado de bienestar
o mejoran el humor
o reducen el dolor
o retrasan el proceso de envejecimiento
o potencian las funciones del sistema inmunitario
o reducen la presión sanguínea
o contrarrestan los niveles elevados de adrenalina asociados a la ansiedad
Hay actividades que aumentan los niveles de endorfinas como pueden ser: comer chocolate, tomar el sol, hacerse masajes, meditación, yoga, bailar, cantar, escuchar música, pintar, moldear, ejercicios respiratorios, correr, ir con bicicleta o nadar, etc.
Una de las razones porque el hecho de “jugar” es tan importante es porque solo el hecho de dedicar un rato a pasarlo bien, ya hace aumentar los niveles de endorfinas.
Las endorfinas son también estimulantes. Cuando los atletas experimentan una liberación de endorfinas sienten que aún pueden más, como si les hubiese inyectado energía.
las endorfinas no son las únicas responsables del bienestar la dicha y la felicidad que produce nuestra mente y nuestro cuerpo, también interviene la serotonina que es conocida como la hormona del placer, y ayuda a regular el sueño, la dopamina que se encarga de controlar nuestros movimientos finos y también de nuestro humor, y nuestra anticipación del placer, entre otras cosas.
Es decir, en resumen, en nuestra mente existe un verdadero frasco de la felicidad, y que permitir que este se abra es decisión personal, que nosotros determinamos cuanta puede ser nuestra producción de hormonas como la serotonina, las endorfinas, etc, que podemos ser literalmente productores de nuestra felicidad.
