Cuestiones de discriminación
DISCRIMINAR O NO DISCRIMINAR ¿ESA ES LA CUESTIÓN?
Poner un énfasis excesivo en la eliminación de conductas discriminatorias hacia cualquier grupo minoritario, popularmente agredido o que sale del comportamiento normalizado en la sociedad actual, podría ser igual de agresivo que la misma discriminación o por lo menos generar efectos similares: cerrar la puerta al cuestionamiento y generar nuevas formas de segregación.
Enfocar la solución al problema de la discriminación, buscando que se eliminen por completo estos pensamientos de la mente humana por considerarlos aberrantes y decadentes sin pasar por el cuestionamiento personal y colectivo de porque se piensa o actúa así, no soluciona la cuestión desde sus entrañas, ya que al igual que la persona que discrimina, se está partiendo de la base de la CERTEZA. Una conducta no se modifica sólo por el hecho de desearlo, ni tampoco con el hecho de rechazarla fervientemente o de tratar de encerrarla en algún lugar donde no pueda salir nunca más y menos con el hecho de cerrar los ojos.
¿Qué quiero decir con esto?
Se entiende que las personas que discriminan tiene la certeza de que existen personas en una clasificación diferente a la suya y a los que considera valiosos, por consecuencia considerará a estos individuos como indeseables y poco apreciables o con un valor nulo. Por el otro lado, estarán las personas que tienen una excesiva preocupación en la eliminación de la discriminación y de todo lo que tenga que ver con ella, utilizando como único medio, para aumentar el valor de los grupo vulnerables por cuestiones de genero, capacidades intelectuales, edad, raza, etc, la certeza de que existen personas en una clasificación diferente a la suya y a los que considera valiosos, es decir considerar a las personas que discriminan como no deseables, poco apreciables o con un valor nulo.
Al hacer esto podríamos estar cayendo en la misma categorización, sólo que cambiando el lado de los buenos y de los malos y generando igualmente una forma sutil de discriminación y de enjuiciamiento. Podemos ver que el blanco violenta al negro, el negro al latino, el latino al homosexual, el homosexual al obeso, el obeso a la mujer, la mujer al hombre y así hasta el infinito y de regreso.
Hemos visto actualmente, con el boom de las redes sociales, personas que comentan y critican un acto discriminatorio con la misma violencia que el propio acto al que critican, emitiendo comentarios igual de sectarios por los que se sienten violentados, y clasificando a las personas que realizan estos comentarios discriminatorios como personas no merecedoras de ser parte de la raza humana. Teniendo nuevamente dos grupos o más en posición de guerra, sin tocarle un pelo al problema y sí teniendo personas asustadas y resguardadas bajo trincheras. Es decir combatir odio con odio, buscando no eliminar las conductas discriminatorias, sino a las personas que discriminan, arrinconándolas y obligándolas a deshacerse de sus conductas violentas no por decisión voluntaria, habiendo tomado el camino del cuestionamiento y la decisión consciente de que sus conductas violentan a otro ser igual que ellos, sino por el miedo al rechazo y aislamiento.
Que tal si en vez de buscar eliminar las conductas discriminatorias con una cirugía radical a corazón abierto de todas las personas que emiten juicios hostiles hacia otras personas, mejor buscamos promover un ambiente cuestionador, es decir, en vez de censurar a la persona que esta teniendo ese tipo de conductas o comentarios, buscamos que se cuestione acerca de porqué los emite o los realiza y más aún podríamos ir más a fondo, detectando en cada uno de nosotros cada momento en que hayamos realizado este tipo de conductas o emitido este tipo de juicios discriminatorios, porque me parece que no es cuestión de grupos, sino de grados. No es cuestión de buscar de que lado estoy, sino que tanto soy y porqué; y entonces ahora si poder ayudar al otro a buscar cuestionar sus conductas y sus motivaciones, más no su valía según el grupo al que quiera pertenecer, de los que discriminan o no discriminan.