top of page

¡¿Embarazada a los 50?!

MAMÁ A LOS 50

“Cada vez hay un mayor número de mujeres de más de 50 años que quieren ser madres. Hay un incremento constante debido a la mejora de las técnicas de reproducción asistida y a que las circunstancias sociales que obligan a retrasar la maternidad se mantienen. Es un fenómeno que aún irá a más”


La maternidad a partir de los 50 es aún ocasional, pero no excepcional. La cuestión, sin embargo, es: ¿Se puede ser madre a partir de esa edad? Conseguirlo de forma natural no es imposible, aunque las posibilidades son remotas. Lo habitual es recurrir a la ayuda de la ciencia, fundamentalmente a través de la donación de óvulos.


Con la edad, por lo general a partir de los 35 años, el organismo de la mujer disminuye su capacidad para adaptarse a los cambios que supone un embarazo. Y a un mayor número de años a partir de este límite el riesgo se incrementa. Existe un mayor número de complicaciones para la madre en forma de hipertensión, alteraciones en las funciones renales y cardiopulmonares, diabetes gestacional, miomas, cesáreas... Las anomalías cromosómicas del embrión también llevan a un mayor número de abortos, partos prematuros y enfermedades para el bebé.


“Las mujeres no rechazan la maternidad, pero desean compaginarla con su trabajo, lo que no es compatible con un número elevado de hijos ni con tenerlos muy pronto”.


Muchas mujeres sienten la presión social del entorno, que las interpela sobre la "no maternidad", a partir de los 30 años. No obstante, el retraso en la edad para tener hijos es, en general, una decisión meditada, condicionada por determinados factores externos como las implicaciones laborales y económicas que supone ser madre, la inestabilidad o carencia de una pareja o, simplemente, no sentirse preparada para afrontar nuevas responsabilidades ni para renunciar a diferentes aspectos que conlleva la maternidad.


Entonces, ¿es recomendable llevar a cabo un embarazo a esta edad? Las circunstancias sociales y económicas de los padres muchas veces son las que determinan cuál es el mejor momento para aumentar la familia, retrasando la llegada del primer hijo a los 33-35 años, y la del segundo a los 40. En cualquier caso, la mujer debe estar siempre informada de los riesgos que conlleva un embarazo en la menopausia o premenopausia, tanto para su salud como para la del niño, y cada caso debe ser analizado por un experto, incluyendo tanto puntos de vista biológicos como psicológicos: aunque en general la mayoría de los centros de reproducción asistida no apliquen estas técnicas a mujeres mayores de 50 años, el médico debe individualizar cada caso, y valorar la historia clínica de la madre para saber si representa o no un riesgo grave para su vida y la del bebé.

No hay etiquetas aún.
bottom of page