Facebook es para mi ABUELA!!!
Las redes sociales no son para los viejos?
Normalmente, solemos relacionar el uso de las redes sociales como una costumbre propia de jóvenes y adolescentes. Sin embargo, también existe un nicho de mercado relegado en estas plataformas: la tercera edad.
Según estudios e investigaciones, en la actualidad, existen 39 millones de usuarios en esos sitios que tienen más de 65 años.
Ese público ve utilidad en la famosa plataforma de micro-blogging para mantenerse informado de forma rápida y fácil sobre la actualidad, además de acceder a información sobre temas de interés como la salud y la literatura.
En cuanto a las actividades que realizan dentro de las redes, lo utilizan para comunicarse con amigos y familia, recurren a Facebook para compartir fotos, participan en juegos sociales en línea, y en concursos y otras opciones de entretenimiento.
De igual manera, mucha de esta población, hace uso de redes sociales para ofertar negocios, para vender artículos o productos, para ofrecer servicios, incluso para formar parte de grupos sociales, lo cual ha sido de beneficio para ellos, ya que les brinda la oportunidad de conocer nuevas personas y enriquecerse nuevamente de la interacción social, la cual para muchos se va perdiendo con el paso de los años.
Los beneficios que pueden aportar las redes sociales van como decíamos desde facilitarnos estar conectados con los nuestros como informados de todo lo que pasa en el mundo. Lógicamente los puede obtener cualquier usuario. Sin embargo, en el caso de las personas mayores, pueden incluso sacarle más provecho por la situación particular de la mayoría de ellos:
Evitar la soledad: a través de las redes sociales, especialmente Facebook y Skype, los adultos mayores pueden ponerse en contacto con familiares y amigos que no viven en su entorno o que, por diferentes motivos, como puede ser un problema de salud, no pueden verse con la frecuencia que les gustaría.
Contactar con antiguos amigos: es muy común entre los mayores que, al echar la vista atrás, se acuerden de antiguos amigos y compañeros con quienes han perdido el contacto. Hoy en día, gracias a las redes sociales, sólo con teclear el nombre de la persona podemos encontrarla, mandarle un mensaje y retomar el contacto.
Estar informado de lo que nos interesa: Gracias a las redes sociales, las personas mayores pueden informarse de temas más concretos, más afines con sus intereses y gustos e incluso seguir a medios alternativos, más minoritarios o especializados, o a personajes relacionados con la información política, deportiva o cultural que nos interesen especialmente.
Potenciar el ocio: tenemos la posibilidad de formar parte de un grupo de pesca, de recibir ofertas especiales de viajes, encontrar cursos específicos, informarse de destinos que siempre te han llamado la atención.
Fomentar las relaciones familiares: aunque hay quien dice que Internet y, en concreto las redes sociales, nos aíslan, lo cierto es que para las personas mayores pueden resultar de gran ayudar para potenciar sus relaciones familiares, especialmente con sus hijos o nietos, ya que es muy común que no vivan cerca o el contacto se haya reducido debido al ritmo de vida actual.
Potenciar su actividad es uno de los principales beneficios del uso de las redes sociales para las personas mayores. Cuando comienzan a utilizarlas, no sólo evitan sentirse solos, sino que se encuentran más integrados en la sociedad, dejan a un lado el aislamiento que les supone no saber comentar una publicación de Facebook o compartir una foto por Instagram como hacen el resto de adultos de su entorno. Es una manera muy efectiva de romper la barrera que les impide, en ciertos casos, estar conectados con la actualidad. A esto debemos sumarle que, el aprender a navegar por las redes sociales, descubrir cada día nuevos usos, buscar, contactar, escribir, leer, etcétera, a través de ellas, también potencia la actividad mental, algo muy beneficioso y necesario para prevenir enfermedades como la demencia.