Abuelos, una de mis extremidades fundamentales (Recuerdos de una infancia plena).
Abuelos, una de mis extremidades fundamentales (Recuerdos de una infancia plena).
Por Khalsa Singh/Orlando Gómez.
Esta vez quiero hacer la entrega de mi redacción justamente a mi Abuela materna, mejor conocida como mi Mamá Amalia.
Esta ocasión quiero contarte desde un enfoque YoguiTrans y a través de la redacción de un poema como mi abuela ayudo a la formación de este Yogui Psicoterapeuta Transpersonal, veras que de algunas líneas aquí plasmadas encontraras similitud o relación en tu historia.
La creación de una identidad es difícil de enraizar, pues llegamos a perdernos con la imagen de nuestros padres,
con la imagen de los tíos,
con la imagen de los primos, inclusive abuelos,
aun con todos ellos,
aun con tu carácter,
aun con tus creencias,
aun con tus ideas, estabas tú para sostenerme.
Solvente,
aguerrida,
apasionada y siempre amada,
tranquila en el andar, mi heroína por demás.
Recuerdo todas esas tardes de charlas,
todas esas mañanas en calma,
las noches que esperaba con ansias, para poder llegar a cama, dormir en medio y fundirme en un abrazo entero, sintiendo tu calor, tu resguardo, tu ser.
Tú ser, cobijando mí ser y sin ninguna palabra de aliento, saberme por completo protegido, amado, mimado, cuidado,
sabía que en ti, contigo, todo era posible, todo era merito, todo tenía un para que, un algo que conocer.
Gracias Amalia,
Gracias Abuela,
Gracias Mamá, por esos años de júbilo y armonía,
por hacer mis luchas tus batallas,
por hacer mis lágrimas tu coraje para ganar mis sueños y deseos.
Gracias por cargar junto conmigo todo lo que siempre fui,
lo que soy
lo que seré.
Gracias por esas noches de desvelo,
por los sabios consejos.
Este mi viaje que también es tu viaje ha sido mágico,
este mi viaje expeditorio, de barco sin velero, que ha zarpado de tu puerto hoy, te ve, con ojos de caricias,
caricias que recibí, que goce, que ame.
Hoy a tus casi 80 es un placer verte y tenerte,
ver como tus ojos se inundan de amor a mi llegada,
ver como tu cuerpo reacciona al oír mi voz,
ver como tu ser se exalta al estar cerca.
Hoy a tus casi 80 es un Honor poder pronunciar tú nombre y Gritarlo.
Gritar ¡¡A M A L I A!!.
Amalia, Gracias por aquellos años de construcción,
Amalia, Gracias por confiar en mí,
Amalia, Gracias por creer en mí,
Amalia, Gracias por caminar conmigo,
Amalia, Gracias.
Gracias.
Simplemente.
Gracias.
Gracias.
Amalia.
Hasta Siempre…….