40 y Crisis
40 y crisis
La crisis de la mediana edad, conocida también como “crisis de los 40”, es una situación que surge de la sensación de estar envejeciendo y comparar las metas logradas con las propuestas. Mientras que esta situación, por la cual no todas las personas pasan, solía ocurrir alrededor de los 40 años ahora está llegando anticipadamente, por el ritmo acelerado de vida, mayores exigencias económicas y profesionales que hoy tenemos.
Los nacidos entre 1971 y 1983 son quienes están en edad de pasar por esta situación emocional. En general, son personas que pasaron de la sencillez de los juegos en la calle con el grupo de amigos a la tecnología interactiva y redes. Fueron los testigos de honor en la transición de lo analógico a lo digital, por lo que les resulta igual de fácil usar un teléfono de disco o hacer una videoconferencia. Es el grupo humano que vivió en su infancia un sentido de estabilidad en cuanto a lo que significaban familia, trabajo, futuro y que parecía tener todo servido para saber cómo funcionaba el mundo, sin embargo, también es la generación que ha vivido más intensamente aquello de: “justo cuando sabía todas las respuestas me cambiaron las preguntas”.
Es la generación que no quiere envejecer y por ello se la juega en los gimnasios y en los quirófanos, comprando juventud adicional, porque si hay alguien que sepa que todo cambia rápida e inesperadamente y ha visto muchas veces que lo que parece viejo es rápidamente reemplazado por algo nuevo, aunque no necesariamente mejor, son los hombres y mujeres que hoy están entre los 35 y 50 años. Quizá algunos hayan visto a sus padres salir jubilados tras 20 o 30 años dentro de la misma empresa y saben bien que su propia historia será diferente, porque la fidelidad a un puesto de trabajo ya no asegura estabilidad ni una futura pensión. Han conocido masivamente una nueva cultura laboral, que representa cambiar periódicamente de empleo y estarse reinventando como profesionista constantemente.
Habrá quienes intentarán resolver su crisis abandonando todo para probar suerte en nuevos ambientes, otros harán un retiro espiritual para encontrar respuestas, algunos apostarán a estar a la vanguardia en moda y con los gadgets más costosos y sofisticados. Unos cuantos aceptarán que algunas cosas en la vida no suceden siempre como se planean, y valorarán lo que han logrado, seguirán estudiando y aprendiendo, trabajarán en innovarán en su empleo o negocio, colocarán más atención en las personas que les rodean y se darán cuenta que la vida no es una competencia de velocidad sino vivir su presente y valorar y valorarse todo lo que van logrando alrededor de su desarrollo social, laboral, académico, familiar, personal, etc.