top of page

Qué hago con tanta frustración?

Frustración

La frustración es el sentimiento de molestia, depresión, ansiedad, angustia y/o enfado que surge en nosotros cuando no podemos conseguir aquello que deseamos o queremos. Todos sentimos frustración a lo largo de nuestra vida, porque, como es comprensible, no podemos conseguir todo lo que queremos. Muchas veces tenemos que elegir esto y prescindir de aquello, tenemos que decidir qué camino o estilo de vida tener, si comprar un coche u otro, qué pareja elegimos, si tener o no tener hijos, y una decisión deja fuera otras posibles opciones, quizás igual de apetitosas para nosotros, y esto genera frustración.

El problema no es frustrarnos, esto es inherente a hacerse adultos, madurar y ser humanos (en la vida la frustración es necesaria para un buen desarrollo de la mente y para un buen desarrollo de la humanidad), el problema es nuestra actitud ante las frustraciones de la vida.

No somos capaces de aceptar que la vida tiene momentos en los que hay que decidir y renunciar, incluso momentos realmente difíciles, pero nosotros no vemos el dolor como algo soportable e incluso como algo que nos hará avanzar y desarrollarnos como personas, sino que sentimos el dolor como algo destructivo que debemos evitar o, en caso de no luchar contra él, acabará con nosotros.

Las personas con baja tolerancia a la frustración tienden a:

La negación de la realidad o al autoengaño: no quieren ver qué les pasa en realidad ni sentir los síntomas que producen darse cuenta de que no pueden tener ciertas cosas en la vida, por lo que tienden a negar la realidad o justificarlas de una y mil maneras con tal de no enfrentarse a la realidad.

  1. Perciben la realidad de manera distorsionada, tendiendo a ver solo lo negativo de las cosas

  2. No diferenciar sus deseos de sus necesidades

  3. Reaccionar de manera desproporcionada o incontrolada frente a la no realización de sus deseos

  4. Tendencia y necesidad de controlar cada aspecto de su vida

  5. Sentir fuerte ansiedad o tristeza y sintomatología depresiva frente a situaciones donde no pueden conseguir lo que quieren

  6. Nerviosismo constante o en situaciones específicas

  7. Miedo al fracaso

  8. Baja tolerancia a la incertidumbre

  9. Poca paciencia

  1. En casos graves, pueden desarrollarse síntomas como las adicciones (internet, compra compulsiva, juego, sustancias…)

  2. Entran en conflicto o desprecian a las personas que no actúan como ellos creen que deberían o que impiden la consecución de sus deseos.

El tratamiento que realizamos de forma genérica, se trabajaremos:

  1. Aprender a aceptar las situaciones que no podemos controlar y que son inherentes a la vida

  2. Aprender a diferenciar qué situaciones nos producen ansiedad y frustración

  3. Psicoeducación emocional

  4. Aprender a expresar los sentimientos y las emociones de manera más adecuada

  5. Uso de técnicas como la relajación y el mindfulness, para poder ayudarte a tolerar tus sensaciones de ansiedad

  6. Ayudarte a dejar de necesitar tener el control y/o ser perfecta

Entender por qué se ha generado la intolerancia a la frustración, conocer tu historia de vida puede ser de gran ayuda para trabajar sobre ella, de forma que podamos juntos encontrar los acontecimientos traumáticos que han podido ser demasiado graves para los pudieras gestionar de manera adecuada. De este modo, te ayudaremos a pasar por esto que te hace daño y que intentas evitar, pero si sigues ocultándote no te dejará ser feliz.

 
 
 
bottom of page